Mi experiencia: dieta del sirope de savia (Día 2)




A media mañana he empezado a tener un ligero dolor de cabeza que ha ido aumentando a lo largo del día, como el creador de la cura del sirope de savia dice en su libro que es un síntoma normal pues he ido pasando el día como mejor he podido. 
No he tenido sensación de hambre, es raro no tener hambre incluso cuando tienes la comida delante pero ha sido así. 
He preparado el desayuno, la comida, la merienda y la cena para el resto de la familia y ha sido fácil tener la comida entre las manos, no he tenido ninguna tentación, supongo que estoy bien concienciada. De todas formas el sabor de la limonada de savia es dulce así que sacia esas ganas de dulce que dan a veces.
Creo que lo que peor llevo es hacer tanto pipí, vivo pegada a la taza del váter.
Hoy también he salido a pasear aunque el dolor de cabeza no me ha dejado disfrutar del trayecto.
Mañana más y espero que mejor.

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